sábado, marzo 15, 2008

Desconectar también es bueno

¿Desconectamos del todo en algún momento, hoy en día? El jueves leía en el suplemento "The New York Times" de El País un artículo de Mark Bittman titulado “Desconectar para así poder reconectar” que me hacía reflexionar sobre el tema. No he encontrado la versión digital en castellano pero sí el original: I Need a Virtual Break. No, Really.

Imaginad un “verdadero día libre”, como se dice en el artículo: sin ordenador, sin móvil, sin teléfono fijo, sin agendas electrónicas… Un día desconectados del mundo. ¿Desconectamos del todo en algún momento, hoy en día? Me alegro de no tener Blackberry, porque seguramente me costaría no leer un e-mail al oír el “bip” que avisa de que tienes correo nuevo. Y esto me hace pensar que quizá algún día acabe pronunciando la misma frase que escribe Bittman en su artículo: “Me llamo Mark y soy adicto a la tecnología”.

Me quedo con estas frases del final del artículo:
“Creo que tiene que haber una manera de imponer cierta reflexión, o al menos tranquilidad, en la vida moderna (…). Una vez que superé el miedo a no estar disponible y lo que ello podía acarrear, experimenté lo que, de no ser tan escéptico, denominaría una levedad del ser. Me sentí conectado a mí mismo en lugar de a mi ordenador. Tenía tiempo para pensar y distanciarme de las exigencias cotidianas. Conseguí parar.”

La semana que viene podremos disfrutar de algunos días festivos. Espero, de verdad, poder desconectar. Conseguir parar, como dice Bittman. ¿Alguien más se anima?


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tener un hijo, como he hecho el domingo pasado, es una buena oportunidad de desconectarse y dedicarse por entero a la prioridad número uno.

Senior Manager dijo...

Siempre hay espacio para desconectar...sólo hay que saber usar el tiempo y hacer cada cosa en la medida justa.

Blogocorp dijo...

Me alegra ver que lleváis bien el tema de la gestión de tiempo ;)

¡Felicidades, Ignacio!